Lunar de cigarro

Que pequeño es el mundo en tus brazos,
me refiero ah que nunca paso frío alguno,
las dudas se acaban con el suspiro que por las mañanas tu beso rescata,
bello lunar de boca de cigarro que te caracteriza,
y no hay como el humo del café para despertarme,
bien sabes cómo reconozco tu cuerpo en la obscuridad,
canto, alegrando tu oído de soprano que tolera mis fallas al pronunciar la
palabra amor,
si es así como las tardes pasàn,
pues sírveme otro vaso de agua que me deshidrato al pensarte,
y bien guardado tienes en un estuche de guitarra
mi corazón y en tu brasier mi alma.

J Barragàn


- Como el rìo, cual quier beso llega a su destino -