Madre e hija

Día a día la cria se va ausentar,
la madre trabajar a ciegas,
y el frio enloquecerlas,


la madre joven, la cria niña,
el frio infranqueable,


cuando se esta lejos de quien quieres
estas más lejos que las millas al sol
que las horas en los siglos
y el pecho se ensancha
como pulmón de lágrimas,


la madre sola, la cria hermosa,
el frío solemne en los Andes,


cuando luchas por el sueño
con los brazos helados
sueles llorar con facilidad
a la sombra del sacrificio materno,


y terminas danzando a la nostalgia
un bolero en el que no importa más
¿a dónde van los años?

 

me acordé de este poema,...