madre marea.

Cuando lastimar es amar allí estoy yo
cuando amar es perder está mi presencia
cuando vivir era amar allí estuve…

El viento se juntó con la vieja marea,
aquella que días me había acogido
a su manera, claro, para salvarme.

DESPERTANDO.

Cuéntame de cuando yo era mía,
de aquellos tiempos fáciles donde el amor
era como una brisa entre los árboles verdes;
cuéntame de cuando tú eras mi madre.

Las explosiones estallaban de manera repentina
y en el viento estaba lleno de tu olor a primavera nueva.
Lo recuerdo, eras tú y era yo.

Mírame y toca hasta el fondo de mi alma,
suéltame y déjame sentir la lluvia que viene del suelo,
mírame y siente cómo lo dulce es rojo y puro,
suéltame y viaja al centro de nuestro bosque.

La brisa bajó hasta concentrarse en mi oído
y beber del líquido de nuestra esencia.
No era yo, tú lo viste.

Y viví, tal y como tú lo hiciste;
creí, pensé y nunca ví este gris
que ahora deja su estela
en mi mar devastado.
marea azul, no me sueltes,
acógeme de nuevo entre los sonidos cariñosos.
Madre de agua, no hay alma ahora,
unicamente suelo desértico.
…Sálvame.

[Grítame y desaparece el nuevo odio,
canta las canciones mágicas y llévate este amor,
que sólo causa un miedo inmediato.
Se mi miedo, marea azul;
se del viento,
se mía y para volver a ser tuya
(marea, memorias, tú
marea, viento, yo;
comienzo).

DURMIENDO.





No es dueto, es sólo el color que me dictó ponerle.
Espero que les guste.