Madre sólo quiéreme

Madre tú que conoces la vida
ayúdame a conseguirla.
Tú que sabes mis desdichas
ayúdame a buscar la alegría.
Tú que entiendes mi dolor
ayúdame a encontrar el amor.

Madre ¿Me dejas entrar?
Madre ¿Me puedes ayudar?
Madre deseo querer y amar.
¿Por qué no me has de dejar?

Ayúdame a olvidarme del ayer.
Ayúdame a ser feliz.
Ayúdame a corregir errores.
Ayúdame a parecerme a ti.

Madre lo siento, perdóname,
no te he juzgado bien.
Estoy arrepentido y triste.
¿Lo crees? pues… ya lo ves,
fueron juegos puros de niñez,
olvídalos, sólo quiéreme.


María Cruz Pérez Moreno - acnamalas.
Derechos reservados.
Madrid. España.

 

Me gusta el ejercicio de ponerse en la piel de otro.
Y por dios, que hombre, incluso el mas recio no ha
caido de rodillas en suplicas de auxilio para una madre
que no pocas veces ya no está.

Chòcala.

 

Buen comentario. Gracias por pasar Vronte.
Saludos y buen descanso.

 

Bello poema repleto de grandes sentimientos y un gran amor se respira de sus versos. Un abrazo. Paco.

 

Agadezco tu comentario.
Saludos Paco Valiente.

 

Gracias. Saludos y buen día.

 

conmovedor poema, la inocencia nunca muere , saludos

 

Preciosa hermosura de poesía divina.
Talento y calidad admirables.

 

Siempre un alegato a favor de la inocencia.
Gracias Mariam González por estar y comentar.
Un placer compartir escritos.
Saludos y buen martes.

 

Maestro cuánto agrdezco su paso y comentario.
Saludos y buen martes.