Madre...

Madre


Mamá fuerte, enérgica con voluntad de hierro,
amante de la verdad y la moral,
de espiritualidad forjada,
eres ejemplo de mujer.

Viviste procurando haciendo siempre el bien,
comprensiva, compasiva con quienes
tienen menos capacidades.

Te rodeaste de gente de oración,
a ellas considerabas tus amigas.
tu orgullo ser íntegra, total
a los principios de Dios.

Corazón abierto, generosa para todos,
tus enseñanzas y principios:
Amar a Dios, a la familia,
ser apóstol con la vida.

Te diste toda, sin reservas,
cubriste nuestras necesidades
materiales, unidas a las del alma.

Nos impulsaste a ser fieles
a nuestra vocación,
porque tú, la has vivido a plenitud.

Has disfrutado de la vida
¡Exprimiéndola hasta la última gota!
Siempre valiente, honesta, positiva.
Venciendo el dolor, para lograr la santidad.

Bendita seas, madre mía!
Encantadora en tus conversaciones,
Te emocionas y disfrutas, hablando de Dios,
eres nuestro ángel guardián en la tierra.

Corazón lleno de amor para todos,
compartir el tiempo contigo
ha sido invaluable.

Déjame un poco de tu fortaleza,
Madre mía,
para poder vivir en esta vida.

 

Pongo a su consideración mis poemas, que no tienen orden, medida, no siguen ningún criterio. Solamente escribo tratando de expresar mis sentimientos, a tontas y locas creo. Mil gracias por leerlos, su crítica me alienta.

 

Sublime oblación a una madre, versos místicos de profunda vocación.
Gustoso de encontrarte María, gracias el talento que regalas.