Maestro.

Te olvidas de una cosa
que yo, no soy yo
sino tú.
Los ojos con qué me miras
maestro que olvida
corazón de las entrañas
discípulo mal avenido
en su corazón retuerce
tanta sapiencia y mentira.

 

Yo creo que la vida nos enseña para poder enseñar, aprender para departir los errores y sí es posible corregirlos, siempre es grato leerte, , saludos

 

La dignidad es un regalo que nos dio Eón.
No sólo el Libre Albedrío.
Ser dignos influye en la bravura de cada cuál.
Soberanos e independientes, luego por tanto, indomables.
Incluso inéditos. Nunca antes vistos. Muy esperados.





Pero claro, si uno es un pesado, y no para de molestar, entonces, ya no parece tan digno.

 

Eres digno para mi. Me gusta tú desparpajo y el encanto que le pones. Hay algo de inocencia pura y cierta malicia... ¿ sátiro ? ¿sileno ?. Aires nuevos en el portal. Un fuerte abrazo.

 

Permite que me desahogue, aunque no sea justo. Muchos besos Marián.

 

Házlo. Besos