Mal de amores (soneto)

Si tu mirada, falta de alegría,
se descompone en lágrimas dolidas
abriendo el corazón en mil heridas,
con el tiempo será melancolía.

Es preciso, al caer en la apatía,
que levantar el ánimo decidas
y evites que esa pena en la que anidas
domine, pertinaz, tu día a día.

No olvides el ejemplo de las flores,
en primavera siempre renaciendo
después de marchitados sus colores.

No vuelvas a incurrir en los errores
que antaño terminaste cometiendo
y que, entonces, trajeron mal de amores.​

​

 

Maravilloso consejo amigo, muchas gracias me lo llevo. Un gusto visitarte.
Un abrazo y muchas bendiciones!!

 

amores cotidianos, amores melódicos, un bello poema, abrazos

 

Bello poema nos dejas. Encantada de leerlo. Daludos.

 

Me parece un soneto precioso, coherente y sobrado de buen gusto poético, Alberto.
Te felicito y aplaudo tu excelente poema.

Es conveniente evitar las asonancias entre versos; en este caso los versos de los cuartetos asuenan: (ia) (ia).
Un abrazo.

 

Un bello soneto nos dejas amigo Alberto donde esa inspiración
nos deja muestra de tu talento poético llegando con mucha
delicadeza al lector. Te felicito por tu bello trabajo.
Ha sido un placer poder pasar a leerte.
Besos y un abrazo. Tere

 

Cada otoño nos deja más mustios, apenas algunas raicillas esperan la primavera... Este ciclo de caer y levantarse que para las plantas es natural, ¡cuánto nos cuesta!

Me llamó la atención el hipérbaton que haces en este cuarteto, al descomponer el complemento directo de «decidas» en dos partes unidas por la conjunción «y» pero separadas por el verbo «decidas». No digo que sea incorrecto, pero cuesta leerlo: mucho más sencillo sería usar en el tercer verso «evites» en lugar de «evitar», lo que simplificaría la sintaxis sin alterar mayormente el sentido.
Las alternativas, en prosa, serían:
[decidas][[levantar el ánimo] y [evitar que...]]
[[decidas][levantar el ánimo]] y [[evites][que...]]
abrazo
Jorge

Es preciso, al caer en la apatía,
que levantar el ánimo decidas
y evitar que esa pena en la que anidas
domine, pertinaz, tu día a día.

 

Muy hermoso soneto . Tiene un aire melancólico, pero es bello. No tienes que padecer mal de amores. Un fuerte abrazo.

 

Pues tienes razón, estimado Luis, siempre estoy tan preocupado por la perfecta rima consonante que a veces me olvido de las posibles asonancias que puedan darse.
Muchas gracias por tu acertada observación que, estoy seguro, servirá para que evite este problema a partir de ahora.
Un abrazo, maestro

 

Muy acertado tu comentario, Jorge, que te agradezco y, como suena mucho mejor, ya he rectificado mi soneto.
Gracias, de nuevo, y un abrazo.

 

Un soneto verdaderamente hermoso...los versos fluyen-como una melodía que acaricia el alma ! Felicitaciones ! Un abrazo

 

un consejo muy acertado mi bello amigo Alberto
tomarlo en cuenta eso creo que cuesta un poquito
por que el mal de amores siempre pega duro
abrazos con saludos

 

Buenos versos nos regalas, Alberto. Motiva sentir que frente a la pena de sentir un mal de amores, siempre existe la posibilidad de recomponernos interiormente. A veces es un proceso doloroso, pero debemos mimarnos el alma y observarnos mucho para que ese amor por nosotros mismos, nos impulse a tener esperanza.

***

​

 

Maravilloso soneto amigo Alberto , Buen consejo al mar de amores . Realmente así es el amor , que después de deshojarse mustio , suele reverdecer en cuanto aparezca la próxima primavera . Mis aplausos a tu excelente pluma .
Un abrazo .