Mandalas en el desierto

Lo que hacemos con arduo trabajo, con detalles y cuidados,
lo destrozamos con impaciencia, con nuestras propias manos,
una obra maestra que no debe ser jamás apreciada por otro mortal,
sólo un castillo de arena, en el que ambos deseamos reinar.

Colores como el arcoíris, don de los sabios.
esperar en silencio, sólo esperando…
Que su corazón despierte temprano,
no cuando el viento borre los trazos.

Diagramas y símbolos de sentimientos que jamás concretamos,
que jamás se plasmaron, sólo en sueños, en nuestras manos,
no pierdas la cabeza, sólo cierra los ojos y cuenta…
Cuantas palabras fueron escritas pero jamás leídas ni comprendidas.

Lo que te quise decir de mil maneras,
con líneas universales, mostrando el interior,
lo que nunca fue dicho, lo que pensaron que dijimos,
un corazón puro enterrado en las arenas del olvido.

Y fueron desechos con nuestras propias manos,
Mandalas sagrados, destruidos ipso facto,
sólo un antiguo recuerdo,
sólo soñando con Mandalas en el desierto….

 

Muy buen trabajo con un aire narrativo.
Me gusta la forma que va tomando conforme
transcurre la lectura, brinda esa sensación de
algo que se está perdiendo y que no se puede hacer
gran cosa para evitarlo.
Un placer leerte.
Saludos.

 

no hay palabras para expresar mi aprecio a este poema genial. es muy buena poesía.

 

Muchas gracias, saludos.

 

Me alegro que le haya gustado, muchas gracias por pasar a leerlo, saludos.