Maravilla

La llovizna es mi genuina manera de mirarte.
Cada gota llega a ti con su aguijón de luz
y sus hélices de brisa.
Sin levantar polvo, me encharco en tus huecos
que repiten todo lo que brilla más allá.
Parece que mis pestañas te tejieran
con debidos intervalos de negrura
para reconocerte de mis ojos, claridad.
Mi mirada debiera ser un suéter o una sombrilla
que en tu intemperie te abrigara,
pero es agua espantada de secarse
sin llegar a tus raíces para transitar al pétalo
y ser de ti algo con forma, textura o color.
Perfume, si no es mucho pedir.
Vengo de ser niebla y pretendo ser océano,
pero sea que nades o los ecos te confundan,
ven a mis ojos: están siempre abiertos
a la maravilla de lloverte.
De yo verte.

10 de noviembre de 2024​

 

Buenos y románticos verdosas nos regala amigo Pedro. Ha sido un verdadero placer detenerse en sus letras y sumergirse en ellas.
Le invito a pasar por mi espacio poético y dejar su huella en él.
Un fuerte abrazo desde los cielos poeticos de este halcon.

 

Compañero Halcón, agradezco que te detuvieras sobre estas líneas y les sumaras tu amable comentario.
Y, claro, tengo en cuenta tu invitación al viaje.
Saludos cordiales.

 

Un poema cautivador. Un gusto leerte.
Abrazo.

 

Estimado Pedro, celebro tu poema, me hizo recordar dos poemas míos, los compartiré porque es básicamente el mismo tema. Tienes fina pluma.

 

Gracias, compañero Ángel, por tu lectura y tu gentil comentario.
Va otro abrazo de vuelta.

 

He leído ya un par de los tuyos y son emocionantes los reflejos que uno encuentra. Gracias por enriquecer al Portal y por los amables conceptos hacia mis textos.
Te dejo saludos afectuosos.