Me presento y excuso

De contarles quién soy, que siento
a quién carajo lo importa,
desde esta isla solitaria que soy sin
vientos, ni gaviotas ni nada, en esta isla
deshabitada llamada dolor.
Sin gaviotas sin mareas solo dolor.
Les cuento algo que a nadie le interesa
pero deje que les diga, que vomitar dolor
es irrenunciable.
Isla de la soledad
sin vientos ni gravedad
mi madre, madre deportada
a un campo concentración 1944
Buchenwald o Auschwitz nombres
inútiles, que no refieren a nada
o una triste voluta del tiempo.
Sufriente pero sobreviviente
Humanismo y discurso
lo sentí en mi infancia ruidoso motor
de la historia
que culpa tuvo
mi padre, mi madre, juzgados,
él pensando,
pensó en los jodidos, apuñalados,
pero sentía de niño es motor sonando
chimpancés criminales
ruidoso motor
pisoteando cadáveres
siempre el ruidoso motor sonando
mis padres tan felices, tan lozanos
sin traumas en un país sin problemas
así crecí
con un padre potente
una madre desolada un hijo muerto
desaparecido, fui, soy feliz con hijos nietos,
con un motor que ruge no se porqué,
siempre en mi centro.
Una hija perdida , un hijo asesinado
monjes negros en ésta
isla solitaria, porqué este dolor que acongoja?
Porque este motor rugiente
noche y día?
Incesante.
Isla solitaria sin vientos,
desolada
ni lluvias
ni gaviotas,
gaviotas
noche y día
Isla solitaria
motor rugiente.
Noche y día.

 

un potente escrito amigo Nelson

 

Noche y niebla