Memoria de pajarito

Toda la gente conciente
en una actitud creyente
nos mostrò su fe evidente
en esta Pascua reciente.

Esta fe no es permanente
pues para el pròximo sàbado
ya estaràn todos mamados
y a la bachata enganchados.

Es muy raro el ser humano.
Es tan afecto al pecado
que enseguida se le olvida
que en la iglesia ha prometido
que cambiarìa su vida.

 

Así pasa siempre, mucho pedir perdón por los pecados, rezos y autoflagelamiento hasta en las comidas, pero pasan las fechas y todo vuelve a lo mismo.
Saludos poeta.

 

Me gusta tu ironía y la musicalidad del poema recuerdan a la canción satírica de Alberto
Pérez...¿has pensado en ponerle musica?.
Gracias por poner un punto de sátira humorística en estos tiempos tan
tristes y turbulentos por los que pasamos,pese a nosotros tan aceladeradamente.