Mi bella diosa

Mi bella diosa


Navegando por el mundo de mis sueños

sumergido en los colores de tu cuerpo

no podía creer lo que sentía

eras tan bella mujer, que una diosa parecías


La intimidad de la noche acariciaba

con armonía la hermosura de tu cuerpo

sentí celos de la noche y sus luceros

pues su fulgor iluminaba todo aquello.


Viajando en paisaje ensoñador

cabalgaba como un potro enamorado

extasiado en el placer y la pasión

que enloquecía a mi pobre corazón.


De tu belleza yo sentía el resplandor

y sumergido en matices de ensueño

tenía el consuelo de adorarte bella diosa

pues sin quererlo despertaste mi candor.


Aun recuerdo el día que sin miedo me invitaste

a recorrer el mundo en carruajes de ilusión

yo me sentía como dueño amo y señor

de tu hermosura ¡oh qué bello es el amor!


No; no es fantasía lo que escribo, es por tu amor

por ti, hoy soy poeta y trovador

con la pasión que me nubla el pensamiento

porque te quiero mujer sin condición


¡Y esto es tan bello; que he perdido la razón!


Autor: Luis César González Moya