Mi querido río Ebro.

Al borde mismo
del río de los iberos
nos hechizo la luna
la luna y su reflejo

o quizá fuese el viento
el viento frío del cierzo
que nos heló por fuera
y calentó por dentro.

Sólo cogí su mano
y ya viví en un sueño
hasta la madrugada;
y fue tan sueño el sueño

la luna tan de plata
que si estuve en su cama
o si cogí su pelo
todo lo olvidé al alba

me olvidé de su nombre
olvidé sus palabras
sólo quedó su amor,
su ternura, en mi alma.

 

Espectacular poema, donde la luna es cómplice de la nostalgia por el gran amor a un río tan famoso.

Un abrazo,

Gladiadora_____________

 

Un dulce amor a riberas del río, y la luna cómplice, alumbrando el momento.
Una estampa muy romántica mi niño, me encantó leerte. Recibe un beso
cariñoso que se apriete en tus mejillas.

 

Vivo al lado del río Ebro y me gusta este tu poema romántico enmarcado en una sensible escritura porque pienso que le haces un bello homenaje a mi río querido. Un abrazo amigo manuelo. Paco.

 

Así es, querido Paco. El Ebro es precioso. Un abrazo desde las orillas del Guadalquivir.