Miradas furtivas

Miradas furtivas

Me arrastra tu mirada titubeante
al fondo literal de mis canciones,
¿Un himno es lo que suena, inspiraciones,
o acaso los secretos de un amante?

Hay un misterio extraño e imperante
debajo de la piel: insinuaciones;
dos seres con furtivas intenciones
en el hondo silencio de un instante.

El mundo se nos cierra y no sospecha
que a plomo cae el cielo en un minuto
y pone nuestros cuerpos en su brecha;

ésto no debe ser y es absoluto:
¡me muero por probar esta cosecha
prohibida y madura de tu fruto!..

 

oh! y ahora quien podrá defendernos? jajajaj...bromita amigo.
tus versos siempre hermosos.

tú si que sabes escribir.

mi abrazo y admiración.

 

Bello poema un gusto pasar a leerte,(felicitaciones) me gusto mucho, un enorme abrazo, Lili.

 

Un buen soneto, Darío, bien escrito y de pulida métrica (mi oído aplaude tu sinéresis en «titubeante»). Solo dos pequeñisimos detalles ortográficos te señalo:
1. La tilde de «ésto» ha sido suprimida por la RAE en todas sus instancias.
2. El el último verso hay al final una puntuación rara: «!..». No sé si quisiste poner solo «!», o «!...».
abrazo
Jorge

 

Un bello soneto nos dejas Dario, donde tu pluma nos deja
muestra de tu talento poético hecho poesía para disfrutar
de una fluida lectura de principio a fin.
Ha sido un placer pasar por tus letras. Un abrazo. Tere

 

¡Bellísimo! Mis aplausos a la entereza y originalidad que brota de tu pluma en este soneto que se bambolea entre las olas del amor y se sumerge en la sima de la oquedad y la pasión. Un placer volver a recorrer la avenida de tus versos en este espacio.

 

Hermoso poema de principio a fin. Te felicito por tu buena inspiración poetica. Saludos y Bendiciones.

 

Gracias Sheyla por tu tiempo y tu lectura, pero por sobre todo: tu comentario tan ¿épico? Jaja
Saludos habitante.
Un abrazo al mejor estilo del gato con botas.

 

Muchas gracias Liliana por tu visita tan fresca e iluminada, es un privilegio contar con tu presencia.
Un abrazo grande.
Darío.

 

jajajajjaj espero que hayas superado esas ansias del fruto prohibido....Realmente un hermoso soneto, los deseos suelen ser traicioneros.Un placer leer tus poesías.