Mirando tus ojos en la distancia

Óvulos, gametos, agua,
Gaya mi cuerpo,
tus ojos mi hacienda.

Tus ojos
magia que emerge alas y salta la distancia.

Tus ojos
paz de tu cara
emitiendo ausencia de guerras,
ojos como pasaje gratis a tu quinta vértebra,
ojos espermatozoides del amor,
tus ónices en el sol blanco de la verdad,
un gracioso amago de cerrar la puerta
cuando retiras la mirada
y gozosas parpadean
tus pestañas de palmera.

Me miras, cobijas y no llevas reglas,
mirarte, mirarte porque me esperas,
caminar, por la delgada línea
entre la calma y lo que daña,
mirarte y no verte,
verte tan lejos,
tus ojos mi tierra,
examinar esos dos agujeros negros
flotando en el huevo del cisne,
luego,
meterme en este vaso de agua
porque el sol como la distancia ciega,
escuchar tu mirada de zumo,
cerrar mis primaveras,
todo cielo, arpas, gardenias,
y encogerme en la patria de tus ojos
besándote.


Chus Soriano
(para mi Esthercita en el aniversario de su marcha a México)

 

Un año ha pasado y todavía siento tus caricias recorriendo mi cuerpo...
Un año hace que temblé entre tus brazos al sentir la despedida...
Un año y parece que fuera ayer cuando recorrimos los lugares del corazón...
Un año, sí, y aún conservo el aroma de tu tabaco, la calidez de tus abrazos y la sonrisa de tu mirada que me dice tantas cosas... sólo tengo que cerrar los ojos para tenerte conmigo.
Ven pronto, ven ahora que todavía es otoño; ven ya para que hagamos los recuerdos con los que sonreiremos en invierno.

Te quiero,

Tu Esther​

 

Hay nombres que al nombrarlos son verdes como Flora, Laura, Lorenzo, Silvia, o azules como Raúl; blancos como Antonio o María, otros son estrellas como Luz, Esmeralda... o lunas como Doria, Soledad...
Esther no, Esther es ojos, y nombre de morada.

Un beso y mi amor
Siempre
Chus

 

Un placer inmenso pasar por tu versos. Mis estrellas.

 

Amiga ludmila, muchas gracias por tu huella. Un beso para ti, Chus