Mis barreras, tu dolor (liras).

Querida vida mía:

te amo con pasión y sentimiento.

Es tanta tu valía

que dígote y no miento,

mereces del amor mi cumplimiento.
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Rezuma la tristeza
una mujer que todo lo merece
colmada de belleza,
solloza y se estremece
por un amor difícil que le crece.

Y en dura lejanía
por ella un hombre yace acongojado,
viendo la lluvia fría
ya que él, enamorado,
con ella no ha de estar, pues es casado.

Cuestiones de la vida;
Amores imposibles y distantes.
Busquemos la salida
humildes y elegantes,
para estos sentimientos importantes.

Y hagamos lo posible
tratando de salvar el corazón,
no sea tan terrible,
no nuble la razón,
el trago de la cruel separación.

Pero, ¿y si se pudiera...
venciendo las barreras y el dolor,
hallar una manera
que pueda con fervor
salvar y proteger a nuestro amor?

Juntemos nuestras mentes
y mientras compartimos el placer
volvámonos conscientes:
tenemos que poder
dejar en el pasado nuestro ayer.

Abril y musa silenciosa / César Guevara / 2014
​

 

En el amor nunca hay culpables, solo víctimas. Nadie quiere enamorarse, nadie quiere dañar al ser que te acompaña...simplemente ocurre.
Tus liras, compañero, son preciosas. A la solidez de la forma, se une coherencia semántica y emoción en el contenido.
Aplausos.

 

Oh, ¡muchas gracias! Aprecio en verdad sus opiniones. Gracias también por la reputación.

 

Me he quedado sin palabras. ....repu merecida.

 

Maravillosa esta melancolía que te inspira tu musa silenciosa amigo . Sepas que para el amor no hay distancia, ni estaciones, ni obstáculos, el amor es más que intento, no lo dejes morir... Te deseo lo mejor pana. Un abrazo.

 

Esa pana siempre consecuente. Voy pa tu casa justo ahora. Digo, tu casa de versos, tus poemas. Gracias. En no dejar morir es en lo que ando.

 

Yo ando sin palabras desde que te vi. Beso.

 

Besos iguales

 

una hermosa y delicada composición nos dejas, abrazos

 

Muchísimas gracias, compañera, por sus auspiciosas palabras.

 

Triste la historia, querido César. A veces el amor tiene estas complicaciones, no elegimos de quienes enamorarnos, simplemente sucede y es condición humana sufrir por una causa que se escapa a los límites de las imposibilidades. Siempre se dice que el solo hecho de haber amado ya nos hace tan grandes, pues cuántas personas pasan de esta vida sin conocer el amor. Ojalá que esta historia pueda tener un final feliz algún día. Nunca se conocen del todo los designios del destino.

***
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Pasa tanto. El amor se antoja donde cuesta más. Muchas gracias por estár por acá y disculpa la tandanza.