Mis dos problemas

Son difìciles de armonizar
dos conceptos tan dispares :
la polìtica y los amores.
Dos cosas que suelen causar
felicidad y dolores.

A mi me gusta bregar,
mejor dicho investigar
los vericuetos polìticos
y a la vez disfrutar
de lo lindo que es amar.

La mala sangre brutal
que me causa el descalabro
de lo polìtico-social,
me la saco cuando logro
a mi pareja abrazar.

 

Interesante su poema, el problema del amor gracias a Dios no es igual a la política para algunos, aunque según dice Quino, "nos separa la cama, millones de tipos durmiendo como se entienden con millones de tipos almorzando" jajaa, esto me parece genial. Saludos