Mis tristezas

Cada noche; taciturnas, furtivas,
Vienen muy calladas mis amarguras,
Descendiendo hasta el fondo de mis memorias,
En la diáspora de mis alegrías peregrinas,
Arremeten despiadadas, las feroces arpías,
Con garras, con uñas; rasgan las pupilas,
Hambrientas brujas,
Por mi aguardan silenciosas,
En una sonrisa escondidas,
Cantando las pálidas notas,
Las cazadoras de esperanzas,
Arriban del crepúsculo prendidas,
Amamantándose de tristezas,
Siempre de luto, siempre malditas,
Como volutas de agonía,
Vuelan las aves de grises plumas,
Buscadoras de almas perdidas,
Acechantes lobas de fauces encendidas,
Pescadoras de melancolía,
Besando con su boca fría,
Vienen a mi lecho, todas las desdichas.

 

me ha gustado su poema, sin embargo, tantas mayúsculas retrasan su lectura...saludos