Moldova

Bailemos para la noche querida mía.
Ven a mis brazos y baila conmigo.
Ven, la luna y las estrellas son nuestras invitadas hoy.
Deja que mis manos tomen las tuyas y las atrape.
Deja que mi cuerpo se enrede con el tuyo.
Deja que la melodía guie nuestros cuerpos.
Vamos amada mía, la noche es nuestra ahora.
El viento sopla y nos envuelve en su regazo.
Mueve tus caderas como una gitana, mueve tus brazos como las alas de un cisne…
Mie bella dama vamos a sucumbirnos con la melodía.
Tus movimientos tan delicados, frágiles y dulzones.
Mira a las estrellas, están aplaudiendo y nos sonríen.
Bailamos muy bien amada mía.
Sigamos así, no paremos, aun no.
Esta melodía es eterna amor mío.
Bailemos eternamente, bailemos hasta que nuestros corazones se fundan, bailemos hasta que nuestros cuerpos se conviertan en uno.
Amor mío, mi amor, te amo, te amo…
Mi dulce y bella dama te amo…
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Interesantes versos, me ha llamado la atención el titulo..por que así se llama el lugar de mi origen. Abrazos.

 

El dulce baile de la inquietud
amarse o solo quererse en aquella danza
es un arte de apreciarse...

Besos rosas a su alma, buen tema...
Kagoma enamorada​