Montañas

Montañas

Señor conticinio por piedras golpeado
con su contorno rugoso y estrellado
destino restringido con contador
visto el vacío cielo tentador.

Pequeños cuernos crecen asomados
el viento sopla, jefe administrador
el tiempo sumiso corre desesperado
por aferrarse a un frágil amor.

Serpentea un camino de camelias
festejando el aura de alegría
el sol con incontrolable tropelia
opaca nubes llenas de apatía.

Bendito bosque de frondosas encinas
con gran dedicación estudian actinometría
fulminarían cualquier rutina clandestina
en negativo sus hojas dormirían.

Permanece este bello clima en alquiler
sin irrelevancia quiere arder
para todo a su alrededor dejar embellecer
con su elegante aroma amater.

Sobrevuela papiroflexia viviente
al frío albino huye repelente
adoctrinada en su rutina presente
a la soltura se muestra clemente.
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Bienvenida, un gusto leer tus letras. Un abrazo