Morir de amor.

Morir de amor.


En el espejo de tu rostro me dibujo,
entre claros, oscuros y tintas de colores...
matices sordos, como viejas estaciones,
deteniéndome en tu boca y la belleza de tu embrujo.

Gotas de amor, como ríos de deshielo,
jugando entre las olas de tu cintura
sumido en un mar de locura,
acariciando en tu rostro el cielo.

Llamas quisiera ser para envolverte,
la sombra que en tu lecho quiere amarte
y hasta el fin de los días poseerte.

Aquel que sin miedo tus penas transite,
que en tus noches heladas te entibie
con el solo afán de que tu alma se excite.

Esperar a tu lado el implacable amanecer,
rodeado de la transparente niebla matutina
sintiendo el calor del sol que apenas ilumina,
abrazado a tu regazo, enamorado de tu ser.

Bendito sol, que estas en el alto cielo
tú que todo lo ves desde tu altar,
dime si alguna vez has podido alcanzar,
a ver tanta belleza, posada sobre este suelo.

Amor, querido amor, mi preciado encanto...
devuélveme la vida que anhelo tanto,
envuelve mi corazón y calma mi llanto.

No dejaré nunca de amarte, de decirte lo que siento,
por que sin tu presencia y sin tu aliento,
mi alma se moriría de dolor y desaliento.

A Ivana, Claudio

 

Preciosas imágenes. Te felicito. Un placer leerte.

 

Un poema que dibuja muy bien tu sentir.

Un abrazo