Muerte de Jose Segundo Cefal.

Quemando el tiempo.
Tirando el mundo por la ventana.
En un bucle
de la Lemniscata de Bernouilli.
Jugando.
La suerte,
la mala suerte
Saltando vías bajo la lluvia.
La playa azul.

Escribiendo en papeles que se lleva el viento
hasta la vía del tren.
No vi el tren
El tren me arrolló
Y se acabó el poema mientras
el cuerpo de policía recogía
los trozos de Jose Segundo Cefal
(aka cefalorraquideo)
esparcidos entre las vías.

 

Se modifico la elipse o la modifico usted. Lo arrolló el tren y ya ve sin querer lo volvió a hacer. Quizás ha resucitado y por eso escribe ingeniosamente. Me encantó poeta . Un saludo y que no sea una ecuación en coordenadas cartesianas, sino una tesis que siga entregándonos letras bien cargadas de talento. Esto, le acompaño en el sentimiento. Bravoooooo.

 

Chiki que con todo eso que me dices me voy a excitar y luego no respondo.
Gracias y bravooooooooooooo por ti.