Mujer De Muchos Inviernos

Mujer de muchos inviernos y pocas primaveras
ya el paso del tiempo dejó en tí
su irrefutable huella,
ya el verano se fue con tu adorable juventud
ya el sol no juguetea con tu sombra como antes
ya no danzan las estrellas en el cielo
ni la luz de la luna ilumina tu figura otoñal.

Mujer de muchos inviernos y pocas primaveras
ya las gotas de lluvias que acariciaban gentilmente
tu escultural figura y endulzaban tu rostro angelical
Hoy ya son solamente recuerdos que viven en tu alma
convertidas en tormentas de soledades.

Mujer de muchos inviernos y pocas primaveras
Fuiste la alegría desenvuelta del verano callejero
con sabor a libertad y amores pasajeros.
Hoy, en el otoño de tu vida
todavía esperas al caer de la tarde
con la mirada perdida en el infinito
a aquel que te prometió el cielo
en una noche lujuriosa de verano pasional
y se marchó con la mañana.

Mujer de muchos inviernos y pocas primaveras
¡Por favor!
no espere más al que nunca ha de llegar ya en
el otoño de tu vida.
porque al marcharse no solamente se robó
tu corazón sino que se fue con tu alegría
y solamente de recuerdo te dejó
la sonrisa triste de la niña de ojos tristes
que todas las tarde te acompaña al malecón.

¡Mujer de muchos inviernos y pocas primaveras!
La vida real es así...

 

Yo me iria con la
mujer de muchos inviernos...

esas esperanzas,
aunque modestas y frias,
pueden mantenernos vivos.

Tu poema encierra una melancolía impresionante,
entretejidad por fugacidad
y a la vez profundidad.

es un muy buen texto,
aunque de pronto
no hay vida real....

aplaudo tu texto

saludos poeta