Murió un beso

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En un mar donde las olas llegan como garras a su orilla,

en esa playa donde su ventana

desayuna un cielo abandonado,

en su misma arena, te digo, murió un beso.



Resucítamelo entonces,

bésame,

deja pensativa tu ceguera,

bésame y distrae el hambre de un amor narcotizado,

arroja mar a mis peces,

porque nosotros,

con el tiempo reducido a cinco lunas de Jonia,

con la noche musical llena de puntitos amarillos,

con el amor ciego,

nosotros íntimamente juntos, al besar,

nos vemos.



Clávame ese beso muerto que aún respira,

híncamelo, porque sexo es fruta pelada

y la felicidad tiene cuerpo de cuchillo,

plántame tus labios ionizados,

fecunda mi boca con tu carne de lluvia,

colócame ojos migratorios por el cielo de Isis,

porque si el cielo me mira con tus ojos,

si las gaviotas sin ti no las recuerdo,

y si la sinfonía de la luz tiene la verdad en su sombra,

la música de un beso es un baile hasta la luna.



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Chus Soriano




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Te mando reputación, estrellas y un beso
Rosario

 

Bellísimo poema, me ha encantado...

 

Nada, el poeta del beso, no te quito el nombre.. Hasta en este beso moribundo, la poesía fluye en un arpegio melódico hasta la sentencia de tener cerca esos ojos por los que muere el beso al bailar con sus labios hasta la luna. Me lo llevo Chus... Me encantò una frase en especial.. "arroja mar a mis peces" me da para mucho... pensamiento, sentimiento e inspiraciòn. Gracias-estrellitas armoniosas. Si no me deja darte reputaciòn.. sabràs por aquì que la he dejado.

 

un placer leerte
saludos

 

Yo te mando una flor, una sonrisa y unas alas.
Muchas gracias y un beso, Chus

 

Este poema es precioso, dejo mi huella pues volveré a él...

Un beso,

Acuario

 

Muchas gracias, ludmila, por tu lectura y amable comentario, me anima que te gustase, un beso para ti, Chus