...Naturaleza primigenia...

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Rondando por un mar de bestias salvajes,
hubo un hombre-bestia que era bestia,
pero su humanidad lo hacia hombre,
fortaleza y temperamento instintivo
arraigaban en primigenia natura insipiente,
era cazador, macho alfa desterrado,
carroñero errante, solitario entre manadas.
La pensante corteza que hostigaba,
mente sapiente limitaba al animal,
lo domaba, lo amarraba, lo amansaba.
En su adentro, en sus cimientos,
ira asesina de nocturna caza, pasión desenfrenada,
copulaba la conciencia raíz de inconsciente fiera,
mientras parían deseos fecundados
e instintos reprimidos...

¿Cuan malsano es el sentido primitivo?
¿cuan oportunos los valores morales?

Si al ser bestia inteligente,
añoro lo impensado en estas líneas,
lo que hube sido en el coto urbano de la caza,
caza-recompensas, buscavidas, cazador de sueños
y que fue apresado en la jaula de las normas y las leyes...
Por eso ésta es mi letrada jungla,
la libre sabana de versos,
do se fugan cuadrúpedas añoranzas de un futuro bípedo,
por encima de la cumbre evolutiva del anhelo.
Pero he perdido la destreza y las garras,
olvidé la piedra y la lanza,
me armé de pluma y tinta,
estableciendo campamento en mi recuerdo
en antisocial orden solitario...

Cuando un día me convidaban los cielos brunos,
en esplendoroso fulgir de perlas,
aquellas primaveras de bestial romance antiguo,
despertaba de un letargo borrascoso,
el sentir fecundo y el aroma a flores,
feromonas por el viento y amor nocturno.
Atraído por descuido hacia pantanos espesos,
hacia el olvidado coto de fieras asesinas,
sometido a los caprichos del instinto
a lo que no comprende la conciencia.
Perdido en sentir inicuo, acerbo,
pero a la vez profundo y bello,
rompiendo todo esquema,
edificado en la rigidez del temperamento
y carácter testarudo,
reducido a cenizas en infame incendio de corduras...

En un abrir y cerrar de ojos
toda ley, regla, norma o principio,
fue olvidado, anulado
y me vi desnudo de cultura,
indeciso, miedoso de mi mismo...

Todo puede desplomar al parpadear,
nada es eterno, ni cierto,
la incertidumbre rige al mundo
y aunque de acero,
la determinación y estructurado pensamiento humano,
son la mayor flaqueza de nuestro ser....


“El sentimiento mas añejo,
el mayor arcano en nuestra vida,
doblega el mas rígido de los pensares
y ablanda el mas duro de los corazones,
no se puede negar su necesidad,
somos plantas sin sol ni agua,
muriendo al tiempo oscuro y frío,
en la soledad de nuestro mundo imaginario”.... [/center:fc889742b2]