Negro sin luz

Me pintaste.
Me encuadraste y colgaste.
En esa pared, sin ropa.
Tiraste mi dignidad.
Realizaste cinco esbozos de mi cuerpo.
Que se distinguieron sobre colores negros.
Y manos alrededor de cada punto clave.
Ojos cínicos idos de sí.
Observando la desigualdad del mundo oscuro.
Que se acercaba rodeado de sombras interiores.
Sin proyectadas ambas partes ni corazones dotados de amor.
Mi mente se desgarro y se fusiono con el diablo de espejo.
Que a su debido tiempo quedo cerrado ante el núcleo sin salida.
Ahogaste, y me ahogaste mis huesos y los lanzaste.
A esa discriminación de mis curiosidades.
Sólo investigue mi oscuridad externa y eso conseguí.
Tener una mala formación y una pésima conducta pudiendo plasmar algo contundente
Como dar forma a una roca que no tiene ni carisma ​

 

Muy visceral, me gusta... saludos.