NiÑos Silenciosos

NIÑOS SILENCIOSOS


El sonido del timbre a las cinco
abría de par en par las puertas de la tarde.

Yo era un niño tímido y silencioso. Uno
de esos niños que siempre salen los últimos
al acabar las clases.
Esperaba mi turno al fondo; en ese lugar tranquilo
donde la soledad del crucifijo y los pupitres
se hacía más presente a partir de aquella hora.

A medida que mis compañeros salían a toda prisa
con sus sonrisas e ilusiones y se perdían
sus voces en el pasillo, la escuela
se volvía para mí más humana y afectiva.

A pesar de mi corta edad y de no comprender
en ese tiempo los entresijos de la vida, yo amaba
aquel silencio que amparaba como una madre
los fantasmas de mi niñez.

A las cinco de la tarde
una parte de mi alma quedaba en calma
y muda tras de mí. (Ahora sé
.......por qué las últimas filas de las aulas
.......están llenas de niños silenciosos)


--oOo--

 

Perder el miedo, saltar la brecha y la siguiente y la siguiente... a veces no alcanza el tiempo que se nos ha dado para lo primero y lo segundo, bueno, esa es la vida dicen; yo prefiero pensar que: "...se hace camino al andar".
Gracias, poeta, por cada verso de nítida sinceridad y armonía y por ese cierre que me sacó recuerdos del rincón del alma.
Besos, un abrazo agradecido y la brillantez de las estrellas,:::hug:::

 

Queda como algo pendiente de decir, aunque todo este dicho.

Como me ha gustado leer este poema.

Un saludo y estrellas

 

Qué recuerdos, José Manuel, desabrochan esos versos. Yo también fui niño de última fila y silencioso. Muy buen poema. Felicidades.
Abrazos desde mi bahía.

 

Gracias Claudieta... no sé si son los que más tienen que decir... pero sí que contar. Ser silencioso hacía que mi imaginación volara, a veces hasta la luna y no me enterara de la lección de ese día, jejeje.
Un abrazo
J. manuel

 

Gracias a ti, Liz, por tanta estrella inmerecida. Tienes mucha razón en lo que dices.
Un abrazo fuerte amiga
J. manuel

 

A mi me queda pendiente agradecerte infinitamente tu comentario. Muchas gracias de corazón
Un abrazo, amigo
J. Manuel

 

Gracias Pedro... sabes? estoy seguro que las últimas filas de las clases estabanllenas de futuros escritores y poetas... como tú, por ejemplo.
Un fuerte abrazo y muchas gracias
J. manuel