NO CUENTA EL TIEMPO

No cuenta el tiempo,
tan solo la esperanza de volver a verte
como quien aguarda el paso del cometa;
un efímero instante
que, en estos renglones, se me escapa.
Te imagino ave de paso,
del aire persiguiendo las corrientes
y cruzando, aquí y allá, los mares,
que son espejos adonde baja el sol
para romper el horizonte.

Por si nunca más volviera a ver
tu ausente placidez entre mis brazos,
recuérdame como al camarada
que muere en la trinchera:
mi pecho abierto, desgarrado,
los ojos ciegos, ya casi vidriosos,
y en mi mano, una última carta inacabada
clamando de ti en un postrer suspiro.

 

Canales un placer la lectura de tu escrito.
Saludos y buen descanso.

 

Gracias por tu comentario, Acnamalas. Saludos.