No escuchéis lo que dicen.

No escuchéis lo que dicen.
Falacias, solo falacias
mentiras subidas de tono
amor de coca-cola
negocios de solidaridad
rollitosde primavera verde.

Mas mentiras,
No escuchéis lo que dicen
salid esclavos prematuros
volad por encima del alienígena,
que nos une con sueño de sindicato,
que nos protege con sucios contubernios.
Malditos, escuchad la advertencia.

Mas mentiras,
no escuchéis lo que dicen
salid esclavos prematuros
volad por encima del alienígena
que nos vende su secreto
que nos salda nuestras cuentas.
Malditos, quiza sea tarde,
escuchad nuestra advertencia.

Poema dedicado a William Burroughs