No puedo estrenar el tiempo

No puedo estrenar el tiempo de los sinsabores,
aunque no falten ganas,
ni puedo jugar al deshojado de las margaritas
aunque no tenga ganas,

ni puedo ver por primera vez
los aledaños de un suspiro
que tras los roces desacompasados
emergía hasta hacer estragos

ya me he tragado más de lo que he querido
entre calles de adoquines
y asfaltos donde el alquitrán consume,

y puedo dolerme sin ayudas prestadas
porque tengo alguna alforja
que revienta y arma luces,

y ya puedo,¡Vaya gloria!,
saber como crujen las bisagras,
de aceites más que olvidadas.

 

No puedo ¡vaya gloria!


Ese humor en las letras, se disfruta.
son puras, abrasivas y necesarias.

Un placer poeta.

 

Gracias,Zero, por tu agradable comentario.

Un abrazo.

 

bueno! amanece en la ciudad, los lugares en la alta de la ciudad; no hay religiones comunes que vuelvan a aparecer, favor de gobernar al mundo, tambien el payaso. ¿por que cobrar todo con cara de desigualdades?. el olor se hace cada vez mas fuerte; SALIR! salir de las ciudades no hay barcos que apuesten como cabañas.

 

Exquisito mi apreciado Javier. Un placer leerte. Besos con mucho cariño. Mil estrellas para tu hermosa letra.

 

Gracias, Isaac, por tu curioso comentario.

Mis abrazos.

 

Muchas gracias, Yaneth, por tu estímulo.

Mis besos