No te esfuerces...

- Tenés que adivinar que tengo entre mis manos... alguna idea?
- un beso.
- Un beso podría ser, si no te los hubiera dado a todos ya...
- un abrazo.
- También podría ser, pero las últimas veces que me acerqué a ti para abrazarte, te alejaste de mi lado, así que no... no te traería un abrazo.
- una lágrima.
- Lágrimas? más lágrimas querés? no... no son lágrimas lo que guardo en mis manos, ya perdí demasiadas que murieron por ti.
- tenés tiempo!... eso traés entre las manos!
- No... intenté sostener al tiempo con mis manos, pero se me fué entre los dedos, y no pude recuperarlo.
- tenés un sueño...?
- No, de hecho no tengo sueños, así que no... un sueño no te traje.
- se me acaban las ideas y esto ya me está aburriendo.
- Arriesgá!
-no. Me cansé.
- Tomá!, te había traido los pedacitos que quedaron de mi corazón... pero veo que no podrás arreglar jamás, lo que vos mismo rompiste.

 

Y es verdad cuando alguien nos rompe el corazón no hay forma de volver a reconstruirlo aún cuando se intenta todo,
gran escrito, abrazos!

 

Divinas letras espléndidas de emocionante inspiración.