Noche de lamentos

La noche está cargada de lamentos abajo,
las estrellas se me hacen tan lejanas
cuando la noche está cargada de lamentos.
¡Quítate los párpados del sueño!
Me grita la noche impaciente,
¡recórreme! acá abajo estoy llena de placeres para ti.
Y en las cuevas todos danzan,
y hay música y mujeres y bebidas que embriagan
y la noche está llena de falsas carcajadas.
Corro y salto excitado
como un cabrito escapado de la manada,
pero algo me asusta
y me escabullo a un rincón
y contemplo cuerpos grotescos
y almas encadenadas
y veo a la noche cargada de lamentos,
arrastrarse como una pesada neblina
que oprime el pecho y marchita el alma.
Y reclamo mi vida junto al río.

 

Como la misma noche la podemos percibir de tantas maneras, puede llenarnos de profunda dicha o convertirse en algo de lo que queremos huir.....Me encanta la manera en que escribes, seguire leyendote, gracias .....un beso ...Tep

 

Es verdad mi poeta querida, la misma noche que cubre con su manto la fusión de la luz para dar la vida en el fragor de los que se aman, es la misma que cubre las miserias del que ya no es. La misma noche que nos abraza y bendice hoy mi Tep, gracias.

Osvaldo.