Noche en un bar

Solo rodeado de gente
siento vocales fornicando con consonantes
desprendidas por bocas ajenas a la mia
recordando así mi siléncio.

Pero ya no passa nada
he perdido mi pensamiento de grandeza
ahora se
que nadie se refleja
en mi imagen de inexistencia.

Esa inexistencia que me ha otorgado
el preciado regalo de la libertad
pues en el momento en que uno pierde a la egocentricidad
asesina a los ojos eternos que a uno le juzgan
bajo el manto de la falsa moralidad
que hacian de mi el centro de todo lugar.

No hay mas allá
soy uno mas
en la individualidad
una pieza mas
fácil de reemplazar
Así pues, vamos a jugar

 

Rayo verde muy buen poema "eso de asesina a los ojos eternos"
muy buena metáfora me gusta,¡Felicidades poeta! te mando
un fuerte abrazo desde Toledo (España)