Norte y sur 16

Cuando sopla el norte duro
y su calor nos agobia
no tolero ni a mi novia
y me refugio en lo oscuro.
Pero el pampero seguro
que promete su consuelo
viene enrrollando en el cielo
un puro de nubarrones
cargado de chaparrones
que apagarán el flagelo.

El soplido del pampero
abre las puertas al sur
que renueva con su azur
el verde del aguacero.
Me siento entonces ligero
como el zorzal que feliz
ha atrapado una lombriz
entre el pasto reluciente:
el sur del norte demente
nos borra la cicatriz.

Estas décimas se basan en un ciclo habitual de los vientos en el verano de mi patria: a un tiempo agobiante y caluroso de viento norte le sigue el pampero, una tempestad del suroeste que despeja el aire y riega los suelos; al pampero le siguen tiempos de viento sur, días frescos y soleados. Hay un dicho que recuerdo en la primera estrofa, que dice: «norte duro, pampero seguro».



El cigarro de un pampero sobre el Río de la Plata.

 

Musicales décimas nos regala,
En cada letra se puede percibir ese calor sofocante, un placer leerle, saludos!

 

Como aire puro llegan este par de décimas. Vientos que nos dejan su santo y seña y que quienes viven las intemperies conocen bien.
Es curioso que en tu tierra los vientos del sur traigan el fresco; aquí nos traen la arena y el calor del Shahara.
Un saludo, Jorge, hasta tu norte de la Pampa.

 

Como en mi tierra es al revés, el sur es el de los calores agobiantes, siempre compagino norte con fresco, pero se ve que allí tampoco es así.
Tus décimas son alegres y demuestran tu sentido del humor, o al menos a mí me lo parecen.
Abrazo.

 

Vaya! Décimas del norte parece que he escrito...

abrazo
j.

 

Hay gente que vive sin saber para adónde va el viento, siempre me sorprende comprobarlo... Sí, estas diferencias entre los hemisferios a veces son paradojales... En cuanto al Sahara... ¿no es una ficción de «Las mil y una noches»? Siempre lo creí así...

abrazo
j.

 

Me alegro de que te hayan gustado las décimas, querida Isabel. Los zorzales festejan después de los chaparrones que hacen asomar a las lombrices, sus golosinas.
abrazo
J.

 

¿Humor? ¿Yo? ¿Cómo te atreves a insinuarlo? Así es, estimada Eratalia, escribí estas décimas con el ánimo ligero de un hermoso viento del sur.
abrazo
J.

 

Mi querido tildero, nos dejas con tus ventoleras unas buenas decimas muy desenfadadas, cosa que me agrada pues refleja tu buen humor
Un abrazo Carmen