¡Nos hundimos, Señor!

¡Nos hundimos, Señor!


Quedó todo en la nada murieron las estrellas
nadie ganó la guerra mas se extinguió la raza,
ya son solo fantasmas lo que hay sobre la Tierra
llevando el alma muerta sin fe y sin esperanza.


Por fin ya los humanos no son ya más los dioses
habiendo tantas flores buscaban la opulencia,
pues siendo como bestias llenándose de poses
tomaron decisiones con poca inteligencia.


Si nada se llevaban después de ser velados
por qué se habrán armado buscando más fortuna,
y ya cuando fue suya por el poder cegados
de pronto se olvidaron, de que la vida es una.


El mundo está de fiesta murieron las bacterias
de nuevo ha florecido la vida que es normal,
se sacudió el planeta las plagas y miserias
y ya no tala el bosque la mano criminal.


No soy ningún profeta pero eso merecemos
al tanto ambicionar viviendo sin conciencia;
mas esta es mi creencia, que tal vez nos salvemos
si ya no hay diferencias y al prójimo lo amemos,
tal vez al verlo Dios... ¡Nos brinde su clemencia!​

 

Bonito poema.
Saludos.

 

Cada persona, vive su Semana Santa particular y de modo diferente.
La religión igual.
Gracias por poner la tuya y compartirla.
Un saludo