Nota a Isabel

Tu amor pasó
como un huracán de deseos fríos...
no dejó tras de sí
mas que escombros de besos
y de olvidos

El decía de sí
que tenía en corazón eterno,
pero para fallir tan sólo le bastaron
unos cuantos latidos...
y los silencios míos acabaron
con su frágil sentido...

No, tu amor inmortal
no era tan fuerte,
una carta no escrita
fue suficiente
para herirlo de muerte.

Adiós dulce Isabel
ya de ti sólo queda
este papel...

 

Hasta en el amor es más fácil mirar la paja en el ojo ajeno.
Los silencios dependiendo la ocasión son grandes asesinos y armas suicidas.
Me gusta ponerme en la piel del otro, puedo hacerlo, más si hay amor...
Allí puedes ver lo que sólo el corazón ve, y saber, que no todo en lo que parece,
y el que ama hace más de lo que dice... Por eso no soy asidua a los poemas de amor... Son puro verso.
La verdad, sólo la sabe el corazón... Y escribimos muchos adioses, que jamás llegan en realidad.

Lindo poema... Me inspiró a reflexionar, y eso me gusta.
Saludos