Obertura

Cuando me gritas naces y sobre el mar desciendes,
cuando te brota el mundo por los ojos inciertos
y te lleva la noche con su curso indomable.
Gritas como en la muerte y en tu boca el amor
forma sus rondas húmedas, su tenebrosa idea.
No existe nada, nada. No sirve nada, nada.
No encontramos un fuego sino en la desnudez,
en esos ríos tibios que en nuestra sangre asoman
cuando exiliamos todo y nos volvemos uno.
Abres la cordillera como un lugar al viento,
a tus paisajes llegan las últimas lloviznas
y en las manzanas secas de los labios caemos
con el temblar profundo de nuestros cuerpos mudos.​

 

Bellísima inspiración compañero..esos amores apasionados o la calma luego de la tormenta. Bello, muy bello.

Te saluda.

Mariela.

 

Muchísimas gracias estimada Mariela por tu lectura, por el aprecio y compartir conmigo.

Saludos fraternos desde Chile, Benjamín.

 

Es un poema exquisito, muchas felicidades por esa forma tan hermosa de expresarte

 

Muchísimas gracias Lunanda por tu lectura y tu visita, un agrado.

Saludos cordiales desde tierra chilena, Benjamín.