Oda.

Oda al padre que no tuve:
Oda a la madre perdida:
Oda al poder que me sostuvo
asido a los amores de mi vida.

Oda al Gran Dios que iluminara
mi camino de dulces sensaciones.
Oda a los buenos que guiaron
mis andares, mis cuitas, mis empeños.

Oda al muy poco amor que he recibido
pues en el desamor he acrecentado
los más grandes amores de mis sueños.

He encendido la llama de lo bueno,
con el poco entender que me han legado:
A pesar del poco amor que he recibido
cual cantares mis letras han hablado

Engrandecido he a mis empeños
para dar a mis entornos los cariños
recibiendo sentires halagüeños.

Y renacer he visto de entre mis ruinas
bellas flores de amor que en mis deseos,
de amar, amor dan... puro y bello...
y a su entorno enaltecen entre las brumas
del umbral del futuro en do lo sueño.

 

He leído, tu hermoso poema... estimado poeta... y he leído al mismo tiempo la historia
de mi vida.... Hay casos así... Pero la grandeza de tu corazón supera al mío... yo no tengo
tanta humanidad... y menos, si sé que el que me provoca lo hace con inteligencia...
Pero tú mensaje final... es único y justo...
Cordialmente:

 

Gracias por el premio que otorgas a mis letras. Un abrazo.

 

¡Ni hablar, amigo! Coincidencias que sólo el destino nos otorga. No conozco algún poeta que carezca de humanidad, y no creo seas el caso. Gracias, por premiar mis letras con las tuyas. Te envío un fraterno abrazo.