Ojos de pez

Has traído el mar a mi calle.

La ciudad te ve sirena y tú cantas con tus labios de espuma,
desde tu océano de islas azules,
junto al eco que los últimos barcos de la noche
arrojan a los postigos de tu casa.

Yo soy el que te mira partir con tus dos alas de metal encendidas,
soy la columna que dibujaste en tu cuaderno,
solitaria como un junco sobre la nieve,
inmóvil como el mármol de una estatua rosada,
curvilínea como el rayo que devora el alud de tu perfil
con el parpadeo eléctrico de mis ojos de pez.

A veces no vives en ti,
huyes hacia el corazón de la luna,
ágil como el murmullo de un río,
insomne como un párpado abierto a los solsticios
que iluminan tu sombra en los portales.

A veces soy yo
tu único mar.

 

Dedicar o inspirarse en alguna persona real, ícono, o en un ser de ficción, no es simplemente escribir características como si se tratara de una tarea de escuela. Inspirarse es lo que veo en tus obras, que dicen, que expresan más allá de un vocabulario rico. Tus letras tienen un precioso trasfondo espiritual y son realmente profundas.
Fue un gusto leerte.
Un abrazo.

 

Creo, estoy convencida, que tú puedes ser mar en el desierto
besos de colores en la brisa estimado amigo,

 

Preciosa entrega compañero.
Felicidades es una gran obra.
Mis aplausos para ti.
Abrazo grande!

 

Gracias, Cecy, por leer y por las palabras que dejas. Un abrazo.

 

Me encanto, hay imágenes que se mueven junto con tus sentimientos, la manera que dibujas la inconstancia , el ir y venir ....es maravilloso .

 

Gracias, Guadalupe, por el bonito comentario. Un beso.