oración ante el cadáver de asaltante de bus en la ceiba

oración ante el cadáver de asaltante de bus en la ceiba

me paro sobre los viejos rieles
andando, sin rumbo fijo.
y es que un hombre pasa sudando con una escalera
cargándola como si llevara la paciencia misma
sobre los hombros.
la indiferencia de los árboles aleja el ruido de las personas:
sentados en las bancas del parque que es una jungla,
los muchachos negros ríen y juegan
porque observan algún video
que ha formado una conciencia feliz en sus memorias.
pero la seguridad escasea
en los corazones de las personas,
y en sus manos llenas de lodo de la jungla.
los corazones escasean en la inseguridad de la gente:
pues las conciencias felices no son lo único
que sale de las cabezas.
sangre como si tuvieras una granada de mano en el cerebro.
sangre como si la bomba nuclear
fuera el pensamiento fulminante de aplastar a tus enemigos.
sangre, sangre como si ante la necedad del mundo,
la sangre de tu cabeza desparramada en el suelo
fuera la única solución.

las leyes del lodo son diferentes a las nuestras.
me aferro a los viejos rieles manchados,
que son mi tesoro.

 

Qué poema mas duro!

"Las leyes del lodo son diferentes a las nuestras!"

Creo que las personas que vivís de cerca el peligro sois de una pasta especial.

No es lo mismo salir a la calle tranquilamente, que tener q hacerlo mirando hacia los lados, con mucha prudencia y salir preparado por si alguien te atraca, o salir preparado por si alguien delante de ti, deja su vida en el asfalto.

Viendo esa imagen, es difícil pensar que la vida puede ser dura, teniendo el paraíso en las manos.

Es posible que seas de las pocas personas que le ha dedicado algo a ese chico, y un poema seguro que el único.

Besitos Fores.

 

Lo normal en el barrio de la Mina de Barcelona, si eres gitano, es pasar por lo menos una vez por la cárcel para que se te respete. Sí, hay muchas leyes y vidas humanas a las que no se les da valor ninguno.

Saludos, Orees.

 

Hay tanta calle lodosa en algunos lugares. Mucha gente en el continente cree en estos días que una buena camioneta, unas ropa exclusiva o una sensación de superioridad vale el riesgo de descargar el cartucho de un arma spbre el que se interponga en su camino, o de recibir en pago la misma moneda...

Es una corrupción del espíritu. Una corrupción del cuerpo. Una corrupción de la mente.

Tenemos que buscar liberar a la gente de esta corrupción que le carcome las entrañas. Por eso apelo a nuestros valores tradicionales, valores que se han puesto de manifiesto en cada ocasión en las que en estos países nos hemos visto contra las cuerdas.

Un besito elenita.

 

Efectivamente esa es la realidad, la triste realidad: un teléfono, un accesorio de moda o volverte famoso o respetado importa bastante más que la vida. La vida del prójimo, o incluso, la vida propia.

Otra vez, aquel poema de dylan thomas vuelve a mi cabeza:

No entres dócilmente en esa buena noche,
Que al final del día la vejez debe arder y delirar:
Enfurécete, enfurécete ante la muerte de la luz...

Eso es lo que nos queda.

Saludos, évano.