Oscuridad dulce amiga- Romance

Oscuridad, dulce amiga,
refugio de mis pesares,
de mi soledad testigo,
compañera inseparable.

Oscuridad, noche eterna,
yo no quiero que me salves,
¡que los duendes me posean,
que los espectros me bailen!

Tú conoces mis pecados,
mis fantasías errantes,
los monstruos que nos habitan
los domamos con el arte.

No tenemos fondo, amiga,
ni cielo, ni mar, ni aire,
pero tenemos los versos
en este Infierno de Dante.

La oscuridad del engaño
es refugio de cobardes
y el demonio de los celos
es colmillo de chacales.

¡Ay!, mi clara oscuridad,
siento tu duende en mi sangre,
y aunque quiero ser tiniebla
en esta noche salvaje,

soy luciérnaga que brilla,
soy el sueño de un instante,
soy la sombra que te habita
en este amar en que ardes.​

 

Pues no te equivocas, jaja, asi es, un viejo romance rescatado del olvido.
Gracias querido Ángel por tu siempre generosa huella.
Un abrazo, fraternal
Isabel

 

Gracias José Benito, valoro mucho tus comentarios.

Si es como un reto a la oscuridad, un decirle: ¡No me dás miedo, soy parte de ti, qué me vas a contar que no sepa, no pienso escapar huyendo...
Algo así como si no puedes contra ella,únete.
Gracias por tu siempre atenta lectura.
Un abrazo
Isabel

 

Gracias Lucio, por tu atenta lectura y tu generosa huella.
Abrazos
Isabel

 

¡Luciana! Qué gratificante lo que me dices, suerte tenerte al otro lado, querida Poeta.
El gusto es mío por tu presencia, siempre positiva y alentadora.Gracias.
Un abrazo

 

jajaja Muy ocurrente. Grandes consejos, los tendré muy en cuenta, ya huele a primavera y la luz se ha tragado la oscuridad.
Besos Lluna.

 

Hola, Vicente, no sabes la alegría que me da encontrarme con tus letras, y que conste que lo he pronunciado con ese énfasis que ponen los italianos, ¡Grazie mille!
No se que tiene el italiano pero recuerdo que un piropo de los suyos te envolvía en su mágia.
Un abrazo, Vicente.
Isabel