Paloma... la que no vuela

Paloma
De Enredaderas sentadas remordiéndose la conciencia
De la nada y de comarcas ancianas
De silencio triste y algarabías contentas
De las que No saben a que temer
De las que temen no saber
Hay palomas…
De las Calladas como el olvido
Y de las que no se acuerdan de nada

PALOMA

Paloma de vuelos dulces llenos de energía adolorida
Paloma de años de cenotes mayas
Profunda como un espacio sideral
Desconocida como las entrañas de una buena mujer
Mensajera como los augurios de un sueño de profecía
Voladora como el viento que se desliza por los siete cielos
Y amada por los chamanes y janeiros
Que hacen pócimas de vuelo a sus alas rotas cuando se enamora
Del palomo que le rompe el corazón la deja callada y con el pecho lleno de rencor

PALOMA

HAY MILES DE ESPEJOS EN EL CIELO
HAY MILES DE PALOMOS EN EL VIENTO
HAY MILES DE CORAZONES QUE ALIVIAR
HAY MILES DE LÁGRIMAS QUE DERRAMAR


Y miles de auras danzan… ahí palomita, por ti, no tan lejos como crees
En el monte mas grande de la sierra madre
Ahí en el maizal del campo y en la caoba del bosque

Ahí te van a esperar, mientras des la vuelta al mundo
Ahí donde las palabras se convierten en “paroles”
Música y ritmo para una tierna ave que acaba de volar
La amarga ilusión del infinito, el sórdido grito revelador
El símbolo rojo de un sentido más…

¡ABIERTO!

PALOMA

Ya no llores, ya no llores por el.
El vendrá si sus alas viven
El vendrá si su corazón recibe
El vendrá si aprende a volar
No lo dejes vivir por lo que es sufrir.
Y ¡arráncale la vida, con un dulce beso de amor! (frase de Agustín Lara)