Pantano...

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Desde aquel pantano
angosto
echose a andar la última
hoja seca...
Las ondas incontables gritan,
y las horas a caballo,
van a pie.
Emergiendo del medio de dos
rumbos sin causa,
surge la pesadilla de atrapar
c-l-a-u-s-u-l-a-s
para rosar
como licencia cenagal
del viento,
un labio enigmático
que por cierto
y por mentira fresca,
lisiado de un huella es.

Desde aquel pantano
angosto,
rotundo es este buen naufragio
entre náyades
y arboledas.
Y bajo el sauce que murió
en pie y comenzaron
a mirar los ciegos,
los sueños...
...sueños son.
La piel del durazno se torna
como vino infante,
y los ojos del misterio
que ríen
para estar despiertos,
duermen hoy.
Dicen por ahí los elfos que...
el oráculo beodo
no trovó hoy sus maldades,
y lo sé.
Es hora...

...de formar las mías.
SDONTLEO - 03/11/10​

 

De lo mejor que he leido ultimamente. Me voy encantado de descubrir tu obra.

Saludos.

 

Muchas gracias Drapo!!!
Saludos!!!!

 

Muchas gracias por tu visita mi estimado poeta!!!
Un abrazo enorme