Pausa II

Vi entonces,
entre montañas nevadas
la llanura de tu pecho
el silencio en tus ojos
la geografía imperfecta
de tu perfil recortado
en la penumbra serena,
agotado tu hacer
respiras
sin ruido
desnudo ,solo...

Dejé la maleta,
extendí mi manta,
te ofrecí algo,
y esperé .

 

me encanto

 

De una dulzura y mansedumbre
a veces tan desacostumbrada para
nuestras mentes turbadas, que turba.
Calma , enternece, solo madres con
sus niños enfermos y amantes que esperan
pueden tener.
Muy bello!!!
Abrazo fraterno.

 

A veces me pregunto por qué tenemos que esperar tanto por todo, cuando la vida es algo tan vulnerable y breve.

Que tu espera sea (o haya sido) corta, compañera. Y que al final te haya traído (o te traiga) cosas tan buenas como buenos son estos versos con los que nos obsequias.

 

En definitiva será eso el amor ?
Un saludo afectuoso a cada uno de ustedes

 

Muy dulces tus letras, trasmites esa paz de la espera confiada, sabiendo que
ya no puedes hacer más. Me encantó tu poema mil gracias por compartirlo.
Besitos cariñosos apretados en tus mejillas.

 

Maravilloso poema Alma, posee una profunda ternura que llega al alma. Fue un gran placer leer tu obra. Un abrazo.