Películas Ponno.

Consumación del matrimonio...


¿ Cómo puede ser posible ?
Si no toco la guitarra.
Pero está dispuesta a bailar conmigo.


Y henos ahí, guitarra y clavicordio.


Encima de la tarima.
Donde el tatami para los luchadores
nipones de sumo, ¡ Tan gordos !
¿ Soprano o contralto ?


¿ Bajo o tenor ?


¿ Quién derriba a quién, si acaban
convertidos en un ovillo de lana ?
Un par de zapatos de cuero.
Unos pantalones de lona vaquera...


¡ Ella es yo ! No puede estar sucediendo.





Supongo que tengo todos
los derechos, reservados.
Copy-Right, ¿ Dónde estás ?
Marca registrada... ¡ Oligarquía !
El Gobierno de unos pocos.


Oh, soy ella, pero yo...


Plutocracia.
Muy pocos vendedores,
para abastecer todo el mercado.
Ehm…


Oligarquía y Plutocracia.
El sonido del silencio.
Aristocracia y artesanía.
Me voy haciendo un lío...


Mujer, ¿ Eres Cro-Magnoide ?

 

Otro/a Beatle.

 

¡ Ah, entonces, podemos funcionar juntos !
Muy bien, ¡ Cuento contigo !
¡ Vamos, Maggie, despierta !





Yo, otrora, era Maggie.
Luego, aprendí Magia.
Y ahora, puedo participar, y no sólo ganar.


Como decían en el programa infantil de Televisión, la Bola de Cristal:


<< Haz deporte, no eches tripa; juega limpio, ¡ Participa ! >>

 

Siempre es para mi un placer leerte por tu gran imaginación

 

Gracias, Mary. Lo mismo digo.
Pero alegría no es placer.
¿ Qué es alegría ? Dinamismo. Diligencia. ¡ Apresurémonos !
Así que podemos leer algunos versos sueltos, y si suenan bien, le dedicaremos cinco minutos, por ejemplo.
Pero si encontramos contradicciones, ahí, ya, no cabe la menor duda.
Es un poema problemático.


Por ello, procuraremos que sea simple, el desarrollo de la historia.
Pues lo simple es magnífico, ya que nos ahorra trabajo.
Pero no tan simple, como para reiterar una misma idea, una y otra vez.
Sino que podemos usar dos o tres ideas, como si fueran las voces, en una sinfonía a tres voces.


En este poema, ¿ Qué ideas participan ?


a ) Sexualidad.
b ) Música.
c ) Transmutación de Oligarquía en Plutocracia, y viceversa.


Como dos gotas de agua.
Y por ello, el sumo nipón, el tatami y los hombres gordos, que se azotan mutuamente.
Tensión que resolvemos con la quietud de guitarra y clavicordio.
Porque son instrumentos de Música, que no luchan.