Pendiente de titulo

A MANUEL CARDOSO.

De dientes para afuera
y sin nada que temer
dejo que un verso rompa el silencio
de mis dedos mudos y paralíticos,
supongo la esperanza como un caldo de cultivo
peligroso...


...se entreabre la tumba de mis ideas,
es solo que hay que poner los dientes,
-los huevos, se dice por acá-
en la defensa de las causas que se vuelven justas
(por costumbre)
y gritar como un demente,
cuando vengan a cobrarte alquiler
por la utopía,


que solo los muertos están conformes
sin tener nada que hacer...
entonces valdría la pena
vivir intoxicados


o no vivir si no se esta de acuerdo


en las propuestas que nos deja el noticiero
cada noche
al
apagar
el
televisor.


Alguna vez seria bueno vivir solo por convicción
y dejar a los matemáticos
la duda,
a los médicos
la cura
y a los locos la fortuna de la cordura abortada,


pediré que sea
un derecho
humano y de los gruesos


la dosis morfiniana de locura
en cada día,
o a cada segundo
si lo requiere
el cuerpo cansado
de la cuota diaria
de guerra,
parricidas,
homicidas,




y las eternas promesas de paraísos desmesurados
que no siempre son
lo que buscamos.




Cuando vengan a cobrarte el alquiler
por la utopía,
pon los dientes
-los huevos, se dice por acá-
pon los brazos al pecho
y cruzados como Nazarenos...


di
que
no,
que la esperanza
no
esta en venta;
di
que
no
que los sueños
no habrán de subastarse
como las carnes
de esa vecina
que te enseño a besar,
que no tienen precio
como las tetas de
París Hilton,


y después ponte a dormir hasta avanzada la mañana.
Ponte a soñar con guerras fratricidas.


Es solo un consejo,
podrías morirte también
si lo desearas,
antes que aceptar este ataúd
donde quieren obligarte...
¿a vivir?

 

Hola mi estimado, como dice pendiente de título me parece que podrías titularlo: Paraíses desmesurados, con esa imagen general me quedo después de leerte.
Me parece un poema lleno de gritos, de señales de alarma, de auxilio, un choque entre lo que debe ser y lo que es, una gama de imágenes y significados de dolor, insomnio, impaciencia y también impotencia frente a la realidad que supera los límites de la certidumbre, del equilibrio y de la estabilidad.
También hay rebeldía en contra de lo impuesto, de lo que ya se puede hacer nada, de la fatalidad...
Te digo lo que más de una vez comentamos, los poemas no se comprenden, no se explican, no se argumentan... sólo se sienten, y el tuyo dice demasiado para ignorarlo.
Un abrazo mi querido amigo.

 

Raquel, una vez mas te agradezco tus visitas y el comentario "psicoanalítico" que haces de este manifiesto de mi locura particular, es una tromba de delirios que salen cada mañana a la luz y cada noche vuelven a anidar en mi, es la incomprensión, la rebeldía que te acallan: "pórtate bien", "no grites", "prohibido", "pare", "siga" "vuelta a la izquierda"...la sordera de quien no quiere oírte, la amargura de quien te escucha a veces en contra de su voluntad...es un grito en letras, lo que siempre quise decir y tuve que callar.

Tienes razón, hay un S.O.S. gracias por no ignorarlo.
Saludos.