Pero era otoño

Quise decirte,
tantas cosas,
pero era otoño,
todo caía, todo,
se teñía, cómo era,
ese tren gris,
que te llevó,
en el, mi alma,
contigo,
mi vida,
ya no fue vida,
una vez, quizás,
resabios quedan,
de besos y versos,
primavera,
allá mi nombre,
en tu voz, allí,
en tus manos,
besándonos,
en las líneas
del destino,
fundiendo,
los sentidos,
sucumbiendo,
en el monte de Venus,
embriagados,
encegueciendo a Zeus,
besé tu alma,
en la noche
de Dionisio,
rozando en un abrazo,
la inmortalidad.

 

Hermosura espléndida de excelente creación, maravilla divina.
Jorge Lemoine y Bosshardt, "Estrella Máxima" de Mundo Poesía.