Pétalo

Así como una carta sin nombre jamás llega a destino, un pétalo blanco se pierde en un viento de perfume. De azahar y cenizas.
Como un aroma pasajero, que conduce la memoria hacia un crepúsculo distante que no se sabe si fue sueño o existencia.
La liviandad del pétalo no inclina la balanza de los días.
Pesa más la roca en el puño cerrado que la guarda y no la suelta.
Cuánto mejor es ser tenue fragancia en el recuerdo tibio, que piedra en la cárcel de las manos, arma, tristeza, o dura realidad.

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El aire o mejor dicho una brisa es liviana y mueve a la rama del árbol.
Depende de la mirada al asunto ¿No?
Y dear digas lo que digas en tus escritos siempre uno sale "tiernamente herido" después de la lectura.
K.i.y.h que mece la plumágica.
Abrazo enorme.

PD: me parece que estuviste viendo tus árboles.

 

Y a mí me parece que tu planteo viene de que lo sutil rige sobre lo denso.
Creo que es una bella utopía que suena bien.
Nuuu, que no haya heridas, amigo mío, ni siquiera de las tiernas. No te equivocás, miro mucho a mi entorno y a veces salen estas cosas.
Otro abrazo bien fuerte camino a noviembre que ya se ve desde el puente de octubre.

 

A veces, cerca de los naranjos, en la primavera, cuando se cuajan de flores de azahar, sus pétalos se desprenden y caen como nieve cálida y blanda, cargada de esa esencia tan especial que crea en el entorno un aroma que embriaga y hace soñar. Y ese soñar nos hace preferir el pétalo a la piedra, especialmente la piedra encerrada en la mano, tan distinta a los cantos rodados que asientan los caminos o las piedras que forman las paredes de nuestras casas.
Lo que es indudable es que tus letras siempre remueven el interior del lector, despiertan sensaciones y nunca te dejan indiferente.
Como siempre, tus líneas son admirables. Te envío un fuerte abrazo y mi aplauso.

 

La verdad, Luis, esta microprosa salió sola ayer y tuve que escribirla; me caían las frases, y sé que es por el entorno que observo y que queda guardado en el subconsciente.
Tu comentario es otra bella microprosa, por eso le di color.
Es cierto que hay piedras nobles y también hay pétalos ficticios.
En este caso es la lucha entre lo sutil y lo denso.
Muchas gracias por aportar tu tiempo, cariño, calidad y calidez para este pequeño relato y por tus palabras gentiles.
Un abrazo grande.

 

Cuánta sabiduría encierran tus bellas palabras mi querida Cecy, la memoria no olvida jamás un perfume querido, perfume asociado a ese ser o instante en particular donde nuestra alma se siente agusto, y sí cuánto más perdurable y valioso es un solo pétalo con aroma a momentos felices que un obsequio enclaustrado en unas manos ambiciosas y esclavas de su tacañería y poca bondad.
Encantada de leerte mi querida y admirada amiga, miles de besos para ti con todo mi cariño....muáááckssssss

 

Muchas gracias por leerme, amigo. Siempre destacaré tu generosidad.
Feliz media semana.

 

Es una interpretación muy bella la que le diste, Isabel.
Como le decía a Luis, brotaron solas estas líneas, creo que son producto de tener algunos árboles de mi jardín con sus flores blancas y cítricas que llevan a que el pensamiento vuele y surjan reflexiones.Muchas gracias por tu cálida huella que valoro, como así también a tu tiempo.
Un abrazo y muy feliz media semana.

 

Que nada o casi nada pueda ser completo en esta vida ¿verdad?

Te abrazo desde aquí, Cecilya.

 

Creo que para los que amamos y nos aman siempre seremos pétalos y lo que esos seres valiosos vean o recuerden de nosotros será lo que deba importarnos.
Muchas gracias por tu generosidad, respeto y amabilidad en cada uno de tus comentarios, César.
Un abrazo y muy feliz martes.

 

Totalmente. Siempre preferible ser ése ser que no ejerce poder sino que aporta condiciones para el crecimiento y el disfrute. Precioso. Me ha encantado. Tú eres un hermoso pétalo.
Saludos amiga.
Luz

 

Me decís cosas muy lindas, Luz, y lo que más valoro y te lo vuelvo a decir, es ese don de lectura comprensiva que no todos tienen y que de verdad a vos te sobra.
Un gran abrazo y gracias por leerme.

 

Es una microprosa cautivante, que invita a una profunda reflexión querida Cecy. Creo que todo depende de las circunstancias y su esencia. Hay cosas suaves y sutiles que hacen bien al alama y otras que engañan con sus artilugios; como también hay piedras duras y toscas que protegen, que dan seguridad y otras que hieren y lastiman.
Me Encanto encontrarte con tu obra amiga.
Un gran abrazo con admiración.

 

Sí, es mejor ser un buen y cálido recuerdo que una pedregosa presencia...
Abrazo grande, Ceci.

 

¿ Cómo saber qué somos para los demás? ¿Porqué conformarnos en la idea del otro?¿Porqué ser insignificantes, tenues, vanos, livianos y fácilmente soportables? o lo contrario, pesados, rencorosos, presentes por demás.¿ Porqué ser para los otros, antes que para uno mismo? Yo no quiero ser ni la piedra ni la dócil flor? Si voy a pasar por este mundo yo quiero arder, yo voy a ser el fuego, la luz de mi camino, mi destino y quien me acompañe, bienvenido sea.

 

Me encanta tu reflexión y te doy infinitas gracias por traer al presente estas palabras.
Es un acto muy generoso el tuyo ese de estar "despertando" algunos ecos de cuando escribía y lo digo en pasado porque francamente tengo toda la energía física, mental y espiritual en la vida real y tangible y no tanto en compartir mis escritos.
Pero como digo siempre, algún día va a volver a mí el gusto por publicar.
Vuelvo a agradecerte, amiga y te mando un enorme abrazo.

 

Muchas gracias por visitar estas viejas letras que una amiga generosa rescató del olvido.
Que tengas muy hermosos días.
Un gran abrazo.

 

Es una muy buena reflexión la tuya y un punto de vista interesante y enriquecedor.
Muchas gracias por haberlo compartido a partir de estas letras mías casi olvidadas.
Muy feliz semana, Gustavo.