Piezas

Huimos y nos escondemos,
pensamos quizás que podríamos dañar
a quienes queremos
y nos alejamos sin darnos cuenta
todo lo que destruimos a nuestro paso.
Buscando una salida
rindiendo nos ante los brazos de la soledad
aislando nuestro corazón, sin darnos cuenta
que así solo gana mas sufrimiento,
que el que podría perder escondiéndose toda su vida.
Decidimos callar tantas veces, aveces por inseguridad
otras porque es lo "mejor"
huimos a nuestros sentimientos
los alejamos de todos, pero cuando ya no queda nadie,
estos son disparados envueltos en llanto
sabemos que ya no volverá a haber una oportunidad
para liberar todas aquellas palabras
y es así como nos ahogamos en ellas.
Nos atemoriza el rechazo
o mas bien el olvido, tememos a que nos olviden sin mas
tememos a morir porque sabremos que olvidaremos
todas aquellas personas que llegaron a nuestra existencia,
que sin saber se hicieron parte de nuestra sonrisa,
pequeñas piezas en el rompecabezas en nuestro corazón
muchos quisieron ser parte, pero nunca encajaron
otros encajaban a la perfección, sin embargo
nunca quisieron formar parte de él.
Muchas otras llegaron en los momentos menos esperados
en cambio otras en los mas necesitados
y lentamente lo fuimos construyendo
con piezas que aveces se perdían
con piezas que nunca existieron
con piezas que olvidamos
cada una de esas piezas fue moldeando
nuestro corazón de manera distinta
y es allí cuando simplemente un día
decidimos tirar las piezas al suelo
por solo una que no encajo
o simplemente porque nos cansamos de estar tanto tiempo
con el mismo trozo de rompecabezas
si hallar un significado
quedando de manera abstracta
y sufriendo un poco por esas piezas
que desaparecieron sin mas
y no tan solo porque se dañaron
simplemente un día despertamos y vimos que habían desaparecido
y lo único que se nos ocurre en ese momento
es huir, escapar sin mas
acompañado de una falsa sonrisa
y de lagrimas resbaladizas
luego comenzamos una vez mas
aveces con mas fichas,
otras con menos
y lo volvemos a repetir una y otra vez
cayendo en un siclo eterno
hasta el día que sin fichas nuestro corazón
caiga destrozado y nos rindamos finalmente
y tiremos la ficha mas importante de todas
esa ficha dorada y especial
la única que nos representa
y quede condenada a las llamas,
apagando la luz esencial que habitaba
en nuestro corazón
desapareciendo nuestra esencia
en miles de otras fichas
que algún día simplemente
desaparecerán.

 

Me gusta este poema solitario...me gusta lo que cuentas y sobre todo como lo cuentas. Un abrazo. Paco.