Poema 30

Un demonio, en mis sueños,
Devora mi descanso;
Mil rayos gotean, en silencio,
Desde las nubes más rojas,
Aquellas que vibran, a lo lejos;
Aquellas que han estado,
Durante más tiempo,
Conteniendo la hemorragia
Del corazón del cosmos.

Ignotos caminos verdes
Se manifiestan entonces,
Tiernamente adornados
Por tréboles milagrosos,
Flores y hierbas nacaradas;
Extraños senderos
Siento trazarse, allí,
Justo donde mis ojos
No son capaces de ver.

¿Quién grita a lo lejos?
Una voz sepulcral
Rasga el rostro del prado;
Y el Infierno emerge,
Entonces,
Sin ninguna dificultad.​

Este poema pertenece al libro intermedio de mi obra"Retazos", en el cual le corresponde el número diez.
Pueden visitarlo en cualquiera de los links que figuran en mi firma.

 

Me parece
que escribe sobre la tentación...
tener varios caminos..
pero sólo tomar el más llamativo
aún sin saber si es el mejor
y la verdad poco importa..
Un gusto leerle
Bienvenido​

 

las nubes con hemorragias, traen en su llovizna desesperanzadora todas esas muertes que no supieron terminarnos.
un delito no haber pasado.

K